Deportes
La extraña cábala que cumplió la familia de Messi en la final de la Copa América
12/07/2021. Celia, madre el ídolo argentino y Diana, la madre de Ángel Di María, contaron en un programa de televisión cómo vivieron la gran final.
Este lunes en Nosotros a la mañana tuvo como protagonistas a Celia, la mamá de Lionel Messi, y Diana, la de Ángel Di María, quienes expresaron su felicidad por la Copa América que obtuvo la Selección Argentina luego de haberle ganado 1 a 0 a Brasil el sábado pasado en el Maracaná.
“Estoy pasando por todas las emociones. Ayer pudimos festejar todos y estar con él (por Leo). Estamos felices. ¿Qué te puedo decir? Estoy nerviosa...”, fue lo primero que dijo Celia durante una comunicación que mantuvo desde el teléfono personal del Pollo Álvarez.
“Estábamos todos mal, muy nerviosos. Fue todo, re duro. Pero tenía fe en Dios de que me iba a conceder este milagro”, agregó la mujer y aseguró que estuvo muy nerviosa durante todo el partido -”me dolía hasta el último pelito- y que por cábala la familia decidió que cada uno viera el partido por separado. “Cada uno lo vio en su pieza, otros en su casa, mi nuera (por Antonela Roccuzzo) con sus padres”.
Por su parte, detalló que ella lo vio en una habitación y su marido, Jorge, en otra: “Yo me pongo muy mal. Con todos mis santos alrededor, hago un ritual”. ¿En qué momento celebraron? “Después de que termina el partido vienen los abrazos”. E indicó que luego de la videollamada que Leo realizó con su esposa e hijos, el jugador se comunicó con ellos. “Ese día hablamos un montón de veces y el domingo lo esperamos. Llegó con los nenes, los sobrinos le hicieron carteles. Estuvimos todos festejando”.
Diana, la madre de Ángel Di María, también habló y contó que su familia mantuvo una cábala similar a la de la familia Messi. Por ejemplo, ella lo vio en su casa con su marido. Los dos solos. Y que su hijo siempre les pide que no griten los goles hasta un minuto después, por si lo terminan anulando. Luego de que la pelota que pateó su hijo entrara al arco, su marido no pudo contener la emoción y festejó. “¡Casi lo mato!”, detalló Diana que aún tenía cautela. Después sí llegó el momento de gritar y correr por el living de su casa. “Parecíamos perritos corriendo por todos lados”.
Este lunes en Nosotros a la mañana tuvo como protagonistas a Celia, la mamá de Lionel Messi, y Diana, la de Ángel Di María, quienes expresaron su felicidad por la Copa América que obtuvo la Selección Argentina luego de haberle ganado 1 a 0 a Brasil el sábado pasado en el Maracaná.
“Estoy pasando por todas las emociones. Ayer pudimos festejar todos y estar con él (por Leo). Estamos felices. ¿Qué te puedo decir? Estoy nerviosa...”, fue lo primero que dijo Celia durante una comunicación que mantuvo desde el teléfono personal del Pollo Álvarez.
“Estábamos todos mal, muy nerviosos. Fue todo, re duro. Pero tenía fe en Dios de que me iba a conceder este milagro”, agregó la mujer y aseguró que estuvo muy nerviosa durante todo el partido -”me dolía hasta el último pelito- y que por cábala la familia decidió que cada uno viera el partido por separado. “Cada uno lo vio en su pieza, otros en su casa, mi nuera (por Antonela Roccuzzo) con sus padres”.
Por su parte, detalló que ella lo vio en una habitación y su marido, Jorge, en otra: “Yo me pongo muy mal. Con todos mis santos alrededor, hago un ritual”. ¿En qué momento celebraron? “Después de que termina el partido vienen los abrazos”. E indicó que luego de la videollamada que Leo realizó con su esposa e hijos, el jugador se comunicó con ellos. “Ese día hablamos un montón de veces y el domingo lo esperamos. Llegó con los nenes, los sobrinos le hicieron carteles. Estuvimos todos festejando”.
Diana, la madre de Ángel Di María, también habló y contó que su familia mantuvo una cábala similar a la de la familia Messi. Por ejemplo, ella lo vio en su casa con su marido. Los dos solos. Y que su hijo siempre les pide que no griten los goles hasta un minuto después, por si lo terminan anulando. Luego de que la pelota que pateó su hijo entrara al arco, su marido no pudo contener la emoción y festejó. “¡Casi lo mato!”, detalló Diana que aún tenía cautela. Después sí llegó el momento de gritar y correr por el living de su casa. “Parecíamos perritos corriendo por todos lados”.