Salta
Boliches salteños advierten que si no les extienden el horario “cierran para siempre”
20/09/2021. Desde el sector alertaron que compiten con las “confiterías bailables” y las fiestas clandestinas, porque su oferta bailable no atrae al salteño.
La apertura de los boliches en Salta se vio frustrada tras una confusión en los protocolos establecidos por el COE, que emitió una resolución habilitando la actividad de los locales bailables hasta las 2 am para vacunados y con un plan piloto.
La confusión se basó en que dicha resolución quedó sujeta a la aprobación del protocolo de parte del Ministerio de Salud.
En diálogo con Profesional Fm, el referente del sector boliches, Mario Delaloye contó que por esa situación solo pudieron abrir el viernes, y señaló que hubo mucho control por parte de las autoridades, y poca concurrencia.
No obstante Delaloye manifestó su preocupación ante la competencia que generan las confiterías bailables, las cuales “distorsionan el rubro”, y las fiestas clandestinas que siguen siendo un atractivo para los salteños, aseguró.
El empresario explicó que debido a la gran cantidad de protocolo, separación por burbujas, el cobro de la entrada, y sobre todo el horario de apertura, mal posiciona a los boliches, que compiten con un bar que no cobra entrada, permite bailar y disfrutar del mismo horario sin tanta restricción, y en el caso de las fiestas clandestinas se extienden durante toda la madrugada.
Acerca de la posibilidad de que les permitan extender el horario, Delaloye sostuvo que las autoridades les dieron 15 días para “cumplir con todo el protocolo” y de ser así les extenderían el horario.
De no ser así, el empresario aseguró que “cierran para siempre”, argumentando que no pueden continuar solventando los gastos que implica el mantenimiento de las instalaciones. Aseveró que por cada día que abren el boliche deben pagar una suma de impuestos que va desde los $25 mil a $50 mil, además de pagar los adicionales policiales y los empleados del establecimiento.
Finalmente, Delaloye reiteró el pedido de los bolicheros para que les permitan trabajar en el horario nocturno habitual, es decir durante toda la madrugada, al tiempo que instaron a las autoridades a controlar los locales para que “cada uno funcione en su horario y de acuerdo a su rubro”.