#Editorial
Urge la pacificación en las tierras campesinas
12/07/2017. El único responsable de mediar en esta situación y evitar el conflicto de convivencia es el Estado, que ahora tendrá seis meses para expropiar como la ley manda y no para apropiarse de las tierras donde hoy habitan familias rurales.
Por seis meses, hasta diciembre de este año, seguirán suspendidas las ejecuciones de sentencias, medidas cautelares, actuaciones o disposiciones judiciales, cuyo objeto sea el desalojo o desocupación de tierras poseídas por familias rurales y pequeños productores agropecuarios, por decisión de Diputados.
La nueva prórroga para regularizar las tierras que habitan los campesinos da una nueva oportunidad al Gobierno Provincial para dar punto final a este conflicto que ya cumplió 7 años.
La solución más adecuada es la expropiación de las tierras como la ley manda, es decir, con el dinero separado para tal fin para pagar a los propietarios, y no apropiarse como viene haciendo en otros casos.
De hecho, un Estado que se apropia de las tierras pierde su razón de ser, puede inclusive hacer una reforma agraria como Venezuela o Cuba, donde se acaba la propiedad y se comparten los espacios productivos.
No es imposible la pacificación del sector entre propietarios y campesinos, pero se tiene que acabar el desgobierno y poner reglas claras, ahora con cuenta regresiva.